• Tal es el nivel de salinidad de este complejo de tres lagunas a tan solo unos minutos de San Pedro de Atacama, que quienes llegan hasta aquí logran disfrutar de una sensación única al ingresar al agua, similar a lo que sucede en el Mar Muerto.

 

Algunos describen que la sensación de bucear es similar a aquella de volar, pero haciéndolo debajo del agua y en medio de un mundo indescriptible y surrealista, muy distinto a aquel de la superficie. La naturaleza es tan sabia, sin embargo, que también ha querido regalar una sensación parecida a aquellos que nunca han tenido la oportunidad de sumergirse en las profundidades con un tanque de oxígeno en la espalda. Para ello ha creado tan solo un par de lugares privilegiados en el mundo en donde es posible flotar sobre el agua, con el cielo encima y el horizonte al frente como límites. Se creó el Mar Muerto en Israel, tal vez el lago de agua salada más popular y visitado del globo. En Chile, por su parte, se formó la Laguna Cejar, que resulta ser un imperdible durante nuestro Tour San Pedro de Atacamajunto a Recorramos Chile, y que nos regala la experiencia de flotar en medio del desierto más árido del planeta.

Desde San Pedro de Atacama, considerada como una capital arqueológica de nuestro país en la Región de Antofagasta, nos dirigimos durante 16 kilómetros hacia el Salar de Atacama, el más grande de nuestro territorio y dentro del cual se nos revela un cuerpo de aguas azules y esmeraldas llamado Laguna Cejar. Se trata, en definitiva, de un complejo natural y turístico que contempla tres lagunas, separadas unos 100 metros entre ellas: Cejar, Baltinache y Piedra, siendo esta última la única que permite el baño a los visitantes. Además, en el lugar hallamos servicios sanitarios, miradores y algunos senderos que permiten recorrer y disfrutar del entorno, hogar de diversas aves entre las que encontramos los hermosos flamencos.

LAS LAGUNAS DE SAL

Una vez llegamos al estacionamiento damos comienzo a esta actividad optativa del Tour San Pedro de Atacama. Caminamos durante un par de minutos por un pequeño sendero rodeado por pastizales verdes y amarillos nos conduce hasta estos verdaderos “ojos” de agua en medio de la aridez del desierto de Atacama. En la zona encontramos algunos miradores techados y con piso de madera, que hace muy cómodo poder mirar y fotografiar el entorno. También para disfrutar de un poco de sombra, que en este lugar se agradece demasiado. En Laguna Cejar, en realidad, solo está permitido hacer observación de la belleza del entorno, lo mismo que en laguna Baltinache. Esto sucede porque en sus aguas encontramos microorganismos que son los que alimentan a los flamencos que anidan en la zona y, en especial, en esta última laguna.

Laguna Piedra, en cambio, permite el baño para los turistas, pero se debe tener precaución al ingresar debido a la alta salinidad de sus aguas, que se estima cinco veces mayor que la cantidad de sal que posee el mar. Se trata de un factor natural que permite que el cuerpo pueda flotar con facilidad y sin esfuerzo, incluso si uno intenta sentarse sobre la superficie del agua. La laguna permite caminar varios metros hacia adentro con el agua que no nos llega hasta más arriba de la rodilla. De pronto, un color azul más intenso nos indica que la profundidad del agua es mayor, invitándonos a mojarnos por completo.

Esta laguna nos recuerda a una playa del Caribe. Arenas blancas y aguas cristalinas. Tal vez las únicas diferencias sean la temperatura del agua y la ausencia de palmeras y resorts con todo incluido. Una indicación importante es no podemos aplicarnos protector solar antes de entrar al agua, con el fin de impedir la contaminación de estas aguas que son el hábitat de muchos animales salvajes de esta región. También es fundamental mantener la cabeza por sobre la superficie con el objetivo de no dañar los ojos. Al mismo tiempo, un buen calzado es importante debido a que existen trozos de sal con puntas filosas que pueden llegar a hacer heridas en los pies o el resto del cuerpo.

Al salir da la impresión de estar formando cristales de sal en nuestra piel, haciéndonos sentir tiesos. Para ello el lugar dispone de algunas duchas con agua dulce para poder enjuagarnos antes de partir de regreso al pueblo donde estamos alojando, donde nos proponemos a seguir disfrutando del Tour San Pedro de Atacama. Recorramos Chile, entonces, para poder tener la experiencia de flotar donde jamás pensamos que podrías hacerlo, en Laguna Cejar.